Una de las cosas más fascinantes de los retos gastronómicos es que puedan surgir tantas versiones distintas de una misma receta, que se plasman en fotografías que poco o nada tienen que ver entre ellas a pesar de nacer todas de la misma fuente.
El reto #VeoVeo pretende hacer
el camino a la inversa
Es decir, vamos a ver qué pasa si en vez de ir de la receta a la foto vamos de la foto a la receta.
Para ello cada mes se facilita una fotografía a todos los miembros del grupo y sin más indicaciones, cada uno debe interpretar qué ingredientes lleva y qué elaboraciones se tienen que preparar para llegar a ese resultado.
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La foto escogida para este mes ha sido esta, un plato de Garreth Wilson, chef en The Private Pass, un restaurante de Melbourne, Australia, y que tiene de leit motiv de su Instagram la frase Never stop playing at work, que es lo que hacemos nosotr@s en el VeoVeo :-)
Os dejo su perfil de IG por si queréis ver su espléndido trabajo.
La foto se intuía fácil, sobretodo porqué al ser más neutra y sin tanto colorido parecía que la elección de ingredientes sería menos complicada. Y creo que así ha sido para todas las que hemos participado esta vez, a pesar de que las vacaciones de Navidad y el ajetreo de estas fechas ha hecho que quizás al final las propuestas no hayan acabado saliendo como se habían planteado, según me han dicho algunas de las participantes, pero creo que también lo hemos hecho lo mejor que hemos podido y que lo hemos pasado en grande haciéndolo.
Veréis que algunas de las propuestas se parecen mucho, a pesar de ser todas distintas y sobretodo, lo más maravilloso, es la imaginación que le echamos para sacar el reto adelante.
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Espero que encuentres en mis recetas la fuente de inspiración que buscas. Si quieres preguntar o comentar, estoy aquí para lo que necesites.Y recuerda, un comentario en el blog es un gran regalo! Blanca